La magia de olvidar el cáncer por un instante
No quería dejar pasar la oportunidad de destacar esta bonita iniciativa. If Only for a Second (Aunque sea durante un segundo), recoge la alegría y sorpresa que experimentan veinte personas con cáncer al ver transformada su imagen.
Mimi Foundation, organización fundada en Bélgica, que lucha contra los dramáticos efectos del cáncer en los ámbitos personales y familiares, ha desarrollado este gran proyecto por el que los participantes han podido olvidarse por un momento de la dura enfermedad que están viviendo.
Para ello, un grupo de estilistas y maquilladores cambian el aspecto a los pacientes sin que éstos puedan ver el proceso. Una vez terminado el trabajo, se les pone frente a un espejo para ser retratados y grabados en vídeo en el momento exacto en el que abren los ojos y descubren su nuevo aspecto.
Todas las fotografías han sido recogidas en el libro Ne serait-ce qu’une seconde. Las personas seleccionadas, casi todo mujeres, muestran su entusiasmo ante tal circunstancia y olvidan aunque solo sea por un segundo el mal que les invade.
Tras terminar con las veinte personas, la fundación organizó una exposición para los pacientes y familiares con todos los retratos. “En apenas un segundo, las caras sonrientes eran unánimes en toda la sala. En ese preciso instante, el cáncer tampoco existía para los familiares de los enfermos” explican desde Mimi Foundation.
Sin duda una iniciativa mágica que aunque no pueden arrancar el dolor a quienes sufren, pueden sacar muchas sonrisas y alejar por un momento aquello que maltrata sus vidas.
Mimi Foundation, organización fundada en Bélgica, que lucha contra los dramáticos efectos del cáncer en los ámbitos personales y familiares, ha desarrollado este gran proyecto por el que los participantes han podido olvidarse por un momento de la dura enfermedad que están viviendo.
Para ello, un grupo de estilistas y maquilladores cambian el aspecto a los pacientes sin que éstos puedan ver el proceso. Una vez terminado el trabajo, se les pone frente a un espejo para ser retratados y grabados en vídeo en el momento exacto en el que abren los ojos y descubren su nuevo aspecto.
Todas las fotografías han sido recogidas en el libro Ne serait-ce qu’une seconde. Las personas seleccionadas, casi todo mujeres, muestran su entusiasmo ante tal circunstancia y olvidan aunque solo sea por un segundo el mal que les invade.
Tras terminar con las veinte personas, la fundación organizó una exposición para los pacientes y familiares con todos los retratos. “En apenas un segundo, las caras sonrientes eran unánimes en toda la sala. En ese preciso instante, el cáncer tampoco existía para los familiares de los enfermos” explican desde Mimi Foundation.
Sin duda una iniciativa mágica que aunque no pueden arrancar el dolor a quienes sufren, pueden sacar muchas sonrisas y alejar por un momento aquello que maltrata sus vidas.
